
Este es un mensaje canalizado. No tengo un nombre para la entidad que lo transmite, pero sà sé que viene de nuestro hogar y que nos ama profundamente. Espero que te sea de utilidad.
Saludos queridos. Soy vuestro hermano de luz. Soy el que estaba a vuestro lado para despedirme cuando os fuisteis de casa e iniciasteis esta aventura. Y soy el que os estará esperando con los brazos abiertos cuando volváis.
Soy lo mismo que vosotros. Exactamente lo mismo.
Esta es una de las cosas que más nos cuesta transmitiros, y que vemos que más os cuesta asimilar.
Por mucho que digamos lo contrario, os seguÃs viendo como seres inferiores.
Creéis que los ángeles son más que vosotros.
Creéis que los seres de luz son más que vosotros.
Creéis que Dios es más que vosotros.
No es asÃ. En absoluto.